En 1875, las hermanas Adèle y Joséphine Mérigault financiaron e iniciaron la construcción de un edificio que tendría varias funciones: orfanato y convento para mojas desde 1878, dispensario con hospital –que más tarde se convertiría en una clínica–, escuela de economía doméstica y posteriormente escuela superior profesional. Estas actividades estuvieron gestionadas por las franciscanas, fieles a la voluntad de las dos benefactoras durante más de 140 años.
En 2011, las monjas decidieron vender la propiedad y la ciudad de Deauville tomó la decisión de invertir nuevamente en un lugar cargado de historia y muy amado por los ciudadanos, para transformarlo en un espacio de cultura que reúne en un único lugar un museo, una mediateca y un auditorio, con el objetivo de derribar las fronteras y revolucionar los ritos y los dogmas de un cierto modo de entender la cultura.
El proyecto arquitectónico del estudio Moatti & Rivière, entregado a principios de 2021, unía la valorización de un patrimonio excepcional con la expresión contemporánea que invita a la contemplación, la imaginación y la socialización a las que el proyecto luminotécnico de 8’18’’ contribuye de manera determinante.
El claustro remodelado simboliza el espíritu de la renovación franciscana y, ahora, una alta cobertura de cristal en estilo contemporáneo cubre su antiguo jardín interior. El histórico espacio del claustro no sufrió cambios. Sus cuatro paredes del siglo XIX con arcos siguen sujetando las tres plantas y los tragaluces del edificio. Los materiales de construcción, tras un proceso de limpieza y renovación, reflejan la luz a través del prisma de la lámpara de araña monumental inspirada en el cielo normando y en el carácter variable de sus nubes.
Por la noche, esta lámpara crea un espacio contemporáneo en el que la luz artificial de 400 Palco Low Voltage, con conexión especial de enganche, irrumpe y se multiplica en los 14 285 tubos que la componen, para convertirse en un símbolo del lugar, de la identidad de Deauville y del proyecto que resplandece por la noche con esta luz mágica.
Debajo de la gran lámpara de araña, el claustro de 400 m² ofrece un espacio luminoso y versátil en el que se encuentra la sala de lectura, un lugar de encuentro que sirve de vestíbulo para el salón de espectáculos de la capilla.
Sin embargo, el salón de exposiciones principal está caracterizado por una cobertura que se convierte en un pozo de luz natural y por la noche doscientas luminarias Laser instaladas en los laterales del profundo tragaluz crean el efecto de la luz que cae desde arriba. En los espacios expositivos y en los salones de lectura, se instalaron principalmente Laser CoB para garantizar una luz difusa y homogénea que, en algunos casos, está integrada con luminarias Palco para obtener una luz de acento sobre las obras expuestas y, en otros, por Reflex Wall Washer para iluminar de manera uniforme las paredes verticales decoradas con cuadros o fotografías. En los espacios de servicio, se utilizaron luminarias Laser Blade XS cuadradas.
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